Autónomos: reglas definitivas para abrir en Fase 1

El camino hacia la nueva normalidad que ha planteado el Gobierno de España pasa por diferentes fases de desescalada. En esta fase 1, en la que muchos establecimientos han vuelto a abrir sus persianas, hay que tener en cuenta una serie de normas de seguridad e higiene que son de carácter obligatorio.

Una de las principales normas es la de la desinfección y limpieza del local dos veces al día. Así lo dicta el Ministerio de Sanidad y el resto de administraciones autonómicas, bajo advertencia de multas por incumplimiento. El objetivo no es otro que el de proteger tanto a trabajadores como a clientes.

Aforos y superficies

Cabe recordar que durante la fase 1 solo pueden abrir aquellos establecimientos por debajo de los 400 metros cuadrados, los que la superen deben esperar a la fase 2 que en muchos lugares de España entrará en vigor a partir del próximo lunes 25 de mayo.

En cualquier caso, los establecimientos con una superficie mayor a los 400 metros cuadrados deberán acotar su aforo un 30% por cada planta, y garantizar que se puedan cumplir las medidas de distanciamiento social (2 metros).

A la hora de atender citas, los colectivos de riesgo tendrán que tener un horario preferente, especialmente los mayores de 65 años, según se especifica en las normas del BOE.

En el caso de los negocios de hostelería y restauración, las terrazas serán los únicos espacios abiertos al público, con un aforo reducido al 50%, y siempre en mesas en las que se pueda garantizar el distanciamiento.

Limpieza extrema

A la hora de analizar las normas de limpieza, debe extremarse la higiene, especialmente en las zonas de mayor uso y contacto con las personas. En las oficinas también deberán limpiarse pantallas, teclados y mamparas.

En concreto, deben realizarse dos limpiezas diarias, deteniéndose en zonas de mayor contacto, por ejemplo pomos, etc. Una de ellas, deberá realizarse obligatoriamente al terminar el día. Dichas limpiezas se avisarán mediante carteles o megafonía a los clientes.

Las taquillas y vestuarios, en caso de abrirse a su uso, también tendrán que ser totalmente desinfectadas, así como los sanitarios, que no podrán ser usados por clientes salvo excepciones.

Fuente e imagen: Cinco Días

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